COMENTARIO DEL AUTOR

Y al final la guerra exigió un trabajo complejo desde sus orígenes, tanto que pienso que será imposible comprometerme con cualquier otro proyecto en la misma medida. Para realizarlo tuvimos dos pilares fundamentales: una cantidad ingente de documentación inédita y la posibilidad de acceder a un amplísimo número de protagonistas. La mezcla de todo ese trabajo dio como resultado un libro único en su género. Escribirlo junto a Lorenzo Silva, uno de los grandes de la literatura española actual, fue un privilegio y una oportunidad de mejorar en muchos aspectos, pero sobre todo de aprender.

Este trabajo alcanzó muchos objetivos: atrapamos en caliente el relato de un importante acontecimiento histórico de boca de sus protagonistas. Algo que pierde el sabor si no se realiza en el momento oportuno. También sirvió para que otras personas iniciaran nuevos proyectos, algunos de los cuales nunca vieron la luz, especialmente los que tenían que ver con el mundo del cine. Quién sabe si algún día nuestros soldados de Irak disfrutarán en la gran pantalla del digno homenaje que merecen.

Para mí Y al Final, la Guerra, significó mucho. En lo personal, un lazo afectivo con los protagonistas del libro que aún conservo. También lo recuerdo, aunque no sea cierto, como lo último que hice como militar en activo, y tal vez lo más importante en más de dos décadas ligado a mi ejército.

Al margen de sentimentalismos, siempre me llamó mucho la atención que fuera utilizada tanto por militaristas como por los opuestos. Tales reacciones me dieron a entender que habíamos conseguido algo de calidad. Aunque siempre quedan el lector o los protagonistas para decirnos lo contrario.